Hola, hoy miércoles 28 de febrero de 2018 estoy en el bar Casa Manolo esperando a una persona muy especial; el mismísimo “Cristóbal Colón” qué está viniendo desde las mismísimas Américas en un avión invisible para hacerle una entrevista y para tomar un café con leche. He leído en mis libros de texto que es intolerable a la lactosa, así que tendrá que pedir un café solo.
Llevaba 30 minutos esperándole hasta que se abrió la puerta del bar y apareció vestido de mago.
Álvaro: ¿Cómo estás? ¿Por qué vas vestido de mago?
Cristóbal Colón: Estoy un poco cansado del viaje, con jet lag. No voy disfrazado de mago, voy disfrazado de mí mismo.
A: ¡Ahhhh vale! ¿Cómo fue el descubrimiento de América?
CL: ¡Uff! Fue un desastre.
A: ¿Pero querías ir allí?
CL: No, pero como estaba borracho me equivoqué en el rumbo y terminé allí. No se lo digas a nadie.
A: Demasiado tarde, ya lo sabe todo el mundo.
CL: No pasa nada.
A: ¿Te gusta el fútbol?
CL: No.
A: ¿Por qué?
CL: Porque en mi época no se jugaba al fútbol, así qué no sé cómo es.
A: ¿Te gusta la música?
CL: Sí.
A: ¿Qué canciones te gustan?
CL: Muchas.
A: ¿Me podrías decir algunas?
CL: Me gustan las canciones del siglo XV.
A: ¿Te haces un selfi conmigo?
CL: ¿Un qué?
A: Un selfi.
CL: ¿Qué es eso?
A: Es una foto que se nos ve la cara a nosotros dos.
CL: Vale, aunque nunca lo he probado…, pero, ¿acaso duele?
A: Como va a doler si es una foto.
CL: Ahhhh, entonces vale.
A: Adiós.
CL: Adiós.
Autor: Álvaro Muñoz.
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